Este día ha sido precioso. Mientras hacía mi primera clase de pulsadas e inversiones con Itzel en Árbol del Yoga, un centro donde hacen yoga y donde entrenan un grupo de gente sus acrobacias y sus perfomances, he conocido a una catalana de Cornellà!
Se llama Rocío y precisamente este verano estuvo trabajando en la Traviesa de camarera y hace seis meses habló con Dani y Dio de su vuelta a Puerto Vallarta para quedarse a vivir. Ellos le dieron mis señas pero nunca las necesitó.
Hoy nos hemos encontrado y hemos sabido que vivimos a dos calles! Ha sido precioso recordar palabras, hablar en catalán, planear jams, recordar la travi y Cosmic Grass.
Me ha hecho recordaros aún más.
Mis melenudos favoritos, con el permiso de Rubens, tocando uno de mis blues favoritos. Os pienso, os celebro, os quiero, tíos.